Jose Parra (4) |
Jose Parra el laureado poeta yaracuyano se convirtió en figura importante del culto a la Reina Maria Lionza, nacido en tierras Marialionceras, amplio conocedor del culto, lo mostró al mundo dejando una visión diferente a la de otros artistas de su época, luchó por su reivindicación junto a personajes como Beatriz Veit-tané y Eliseo Jiménez Sierra se esforzó por realzar la belleza de su tierra y del culto.
"Por las calles del pueblo de Chivacoa un niño juega en el solar de los encantos, entre aromas de mangos y guayabas. Los pájaros cantan desde las ramas de árboles sembrados en tierras donde toda semilla germina. El niño mira hacia la montaña de Sorte y entre el tupido follaje alguien extiende sus brazo y mira al cielo como invocando ausentes presencias. El niño mira aquella figura femenina con asombro. Era la Diosa María Lionza, que con extraño ademán le señala una ruta, un camino. Desde ese día cruzó la quebrada de su pueblo y no regresó a su casa. Dicen que un ave se lo llevó por las nubes y en sus alas fue creciendo con una sonrisa que sólo la tienen los encantados o los poseídos por la alegría del buen humor. Suavemente el ave lo deja caer en El Paraíso de la ciudad de Caracas. Allí, vivió muchos años en una casa grande, con un patio lleno de árboles frutales, arbustos y flores, muchas flores. En esa casa, con su buen humor escribe poesía y prosa humorística con una gracia muy especial. Acostado en su cómodo chinchorro bebe los vinos del sueño y el descanso. Nos referimos al poeta humorístico José Parra, quien mira y escucha con atención las cosas que los seres humanos hacen todos los días, captando la gestualidad de la gente y escuchando lo que dicen, para después llevar sus atrevidas impresiones a sus versos con su delicado sentido del humor. Nunca cayó en la comicidad fácil y trivial. Su humorismo está unido a la sonrisa sana, hasta se moja de él mismo. Escribe con la sencillez que caracteriza el habla de la gente por las calles y casas de la cotidianidad. Su casa abría las puertas con entusiasmo y hospitalidad para que pasaran sus amigos de tertulias, copas de vino, lecturas compartidas y cantos improvisados acompañados de ritmos de mandolina y guitarra. Todavía se escuchan desde su chinchorro vacío y desde el rincón de sus libros, las palabras de sus amigos de canto y conversa: Pedro Sotillo, Rubenangel Hurtado y Elisio Jiménez Sierra."(1)
"Nació en Chivacoa el 7 de marzo de 1907. Estudió en la Escuela Federal nº 2. Realizó cursos de contabilidad en la ciudad de Valencia donde continuó sus estudios superiores. Se le reconoce en el contexto regional, nacional e internacional como poeta de obra consolidada desde su primer trabajo literario publicado en 1943 y titulado Valámes, obra de lirismo romántico y melancólico que sería una constante en su producción literaria. Su obra literaria se caracteriza por construir con metáforas la cotidianidad de antaño y hechos históricos de Yaracuy y ha sido catalogado como un escritor de estilo romántico y neo-clásico. Obtuvo mención de honor en los juegos florales Internacionales de México en 1947 con el poema Tierra de gigantes andariegos; recibió el Primer Premio del Concurso Latinoamericano de Romances Arca del Sur, realizado en Montevideo, Uruguay en 1955, cuya condición era la de escribir sobre un mito del continente americano, premio que ganó con la obra titulada María Leonza. Entre sus obras más destacadas se encuentra Una Zona en el Tiempo, que narra la historia del municipio Bruzual. Además de escritor y contable también se desempeñó en cargos públicos como director de administración de gobierno del estado, director de política del estado Guárico, jefe de contabilidad de la aduana, secretario general de Sucre, entre otros cargos de importancia.
Su vida es parte de su obra. El humor presente en sus relatos es el aporte de sus cuentos a la literatura venezolana. Ese mismo toque de picardía que posee como autor lo mantiene en su vida personal. Este escritor venezolano toma realidades locales de la cotidianidad nacional y hace del narrador hípico, salsero y del inmigrante personaje universal unos de los mejores poetas venezolanos."(2)
La Casa de la Cultura “José Parra” de Chivacoa fue creada con el objeto de divulgar la importante obra literaria de este escritor quien siempre reivindicó la cultura yaracuyana por medio de su poesía, publicó los libros Velámenes (1943), Interludio (1946), De itinerarios habla el corazón (1954), Media gruesa de amor (1971), Desde el signo inicial (1974), Una zona en el tiempo (1978) y Para qué pantalones (2006). Muere en la ciudad de la Victoria en el estado Aragua en 1993.(3)
@RubenTamanco1 |
Referencias:
- http://manuscritosantiguos.blogspot.com.ar/2009/12/jose-parra.html
- http://www.buenastareas.com/ensayos/Biografia-De-Poeta-Yaracuyano-Jos%C3%A9-Parr/3721997.html
- http://notiyaradigital.webnode.com.ve/news/yaracuy-conmemora-este-jueves-los-108-anos-del-nacimiento-del-poeta-jose-parra/
- Imagen on line: http://yaracultura.blogspot.com.ar/2012/03/hoy-recuerdan-al-poeta-jose-parra-en.html
Muy buena la información sobre el poeta. José Parra fue compadre de mi abuela Hilda Elena.
ResponderBorrarHermano Nestor, muy agradecido por tu comentario
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